¿Es aconsejable regalar un perro o un gato en Navidad?

Regalar un perro o un gato en navidad ¿Buena o mala idea?

Si estás pensando en regalar un animal de compañía por Navidad, te proponemos tener en cuenta los puntos clave que destacamos en este artículo para que seas consciente de que la adopción de un animal conlleva una gran responsabilidad.

La intención de adoptar se incrementa antes de Navidad

Los resultados de nuestro último estudio “Él nunca lo haría” sobre adopción y abandono de animales de compañía, indican que un 36% de las protectoras detectan que las peticiones de adopción crecen antes de Navidad.

Desde la Fundación Affinity creemos que perros y gatos no deberían ser objeto de regalo ni en Navidad ni en otros momentos del año. Menos todavía cuando se trata de regalos impulsivos y por sorpresa. De cara a los más pequeños de la casa, un 80% de ellos han pedido perros o gatos para Reyes o Papá Noel alguna vez, pero es importante transmitirles la idea de que los animales no son juguetes y ser conscientes de las obligaciones que se adquieren en el momento de adoptar a un animal.

Antes de adoptar un perro o un gato para regalar, lee esto:

  • Un ser vivo no debería ser un regalo
  • El 67% de las protectoras creen que parte de los animales abandonados a principio de año fueron regalos de Navidad.
  • Convivir con un perro o gato es una decisión que influirá en los próximos 10 años o más de la persona o familia con quien conviva. Por lo tanto, la decisión debe ser consensuada entre todos los miembros de la familia y cada uno tiene que estar dispuesto a asumir su parte de responsabilidad en el cuidado del animal.
  • La persona que recibe al animal de compañía debe haber reflexionado y expresado su claro deseo de convivir con un animal de compañía y tener la capacidad para cuidar de él de forma responsable. En ese caso, tu contribución puede ser acompañarla a la protectora y ayudarla en el proceso de adopción.
  • Si estamos pensando en regalar un animal a un niño, es fundamental saber que su interés por él puede variar una vez no sea novedad o bien distanciarse debido a otros factores propios de su proceso de desarrollo (más horas de estudio o irse a vivir fuera de casa). Tampoco podemos creer que el menor será el responsable del animal sino que la responsabilidad siempre es del adulto.
  • No es una buena idea dar un animal como sorpresa. Por el contrario, es importante que todos los miembros de la familia participen en el proceso de búsqueda y selección del animal de compañía. La participación favorece la creación de un vínculo afectivo entre la familia y el animal.
  • Adopta según vuestro estilo de vida: tener en cuenta el tiempo que podemos dedicar al animal, los recursos, lo que hacemos en nuestro tiempo libre… Es muy importante de cara a la adopción para asegurar cubrir las necesidades físicas y del carácter del perro o gato. Dejarnos llevar por la apariencia física u otras cuestiones más superficiales no es aconsejable.
  • Por último, si habéis tomado la decisión de adoptar un animal que formará parte de vuestra familia, recomendamos que la llegada a casa no sea en los días en los que tradicionalmente se reciben juguetes para no lanzar a los niños un mensaje equivocado.

Por una adopción responsable, ahora y siempre.